domingo, 22 de abril de 2018


El puente Tacoma Narrows (en Seattle), uno de los más largos de Estados Unidos en su tiempo, es el clásico ejemplo de los fallos que ha tenido la ingeniería. Medía 1600 metros de longitud, con una distancia de 850 metros entre los soportes. El puente ha sido construido dos veces, debido al famoso derrumbe de la primera de sus construcciones; un colapso estructural desastroso que produjo el viento al manifestarse el fenómeno físico llamado flameo, que fue producido por la resonancia mecánica creada por los remolinos del viento.
La resonancia mecánica consiste en que un cuerpo en reposo con capacidad para vibrar, entra en contacto con una fuerza periódica cuyo periodo de vibración coincide con el de dicho cuerpo, por las características que tengan sus materiales y la circunstancia en que se encuentre

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